jueves, 28 de febrero de 2008

La pedorrina nos va a extinguir

Últimamente todo se debe al cambio climático, el frío, el calor, la lluvia, la sequía, etc.

Muchos le echan la culpa a las grandes ciudades, a la tala de árboles, a la industria, incluso mi novia maneja con las luces apagadas para no contribuir a este inminente cambio en la evolución del planeta.

Hace poco le platiqué a alguién, no me acuerdo a quién y por cierto se rió mucho y no me creyó, que el 53% de los gases que causan el efecto invernadero provienen del ganado, en forma de pedos.

Las pobres vacas, además de estar locas contaminan más que los coches.

Si se toman las emisiones directas de una vaca lechera y se comparan con las de un coche, el resultado es sorprendente: esa vaca emite en un día lo mismo que ese coche en unos 50-60 kilómetros. En España, Australia, EUA, Nueva Zelandia, etc hay millones de cabezas de ganado, entre vacas y borregos.

Existe una solución, la cual veo poco probale o muy difícil de implementar: Científicos australianos intentan trasplantar una bacteria propia de los canguros al estómago de ovejas y bovinos con el fin de que sus flatulencias dejen de contener metano, uno de los gases que más acentúan el calentamiento climático junto con el CO2. (los pedos de los canguros no contaminan). Gracias a dicha bacteria, los gases de los canguros no contienen metano, así que ellos no contribuyen al incremento en el volumen total de emisiones de gases de efecto invernadero.

Como verán, esto se pone cada vez más complicado de solucionar y así como un día a la semana no se usa el coche (bueno en algunos casos), tampoco coman frijolitos, habas, coliflor u otros alimentos pedorrinos (como decía mi abuelo Ernesto) para que no afectemos a nuestra madre tierra.

martes, 19 de febrero de 2008

La hormiga y el no-universo

¿Qué hay más allí del universo? Supongo que el no-universo.
Imaginémonos convertidos en una hormiga muy inteligente que vive en medio del continente americano. A lo largo de una vida entera de viaje habría cubierto kilómetros y kilómetros cuadrados de superficie terrestre y con ayuda de unos binoculares inventados por él mismo vería miles y miles de kilómetros más.
Naturalmente, supondría que la tierra continuaba sin fin. Pero la hormiga podría también preguntarse si la tierra se acaba en algún lugar. Y entonces se plantearía una pregunta: “Sí la tierra se acaba, ¿qué habrá más allá?” Su única experiencia está relacionada con la tierra. La hormiga nunca ha visto el océano, ni tiene la noción de océano, ni puede imaginarse más que tierra. ¿No tendría que decir: “Si la tierra de hecho se acaba, al otro lado tiene que haber no-tierra, sea lo que sea eso”, y no estaría en lo cierto?
Pues bien, si el universo se define como la suma total de la materia y energía y todo el espacio que llenan, entonces, en el supuesto que el universo tenga un fin, tiene que haber no-materia y no-energía inmersas en el no-espacio al otro lado.

Y si el universo nació como una bomba de energía a partir de nada, entonces más allá del universo hay nada, o lo que quizá es lo mismo, no-universo.

jueves, 14 de febrero de 2008

Yo sí lo se...



Si aprendiéramos a vivir desde el nivel del alma, veríamos que la parte más valiosa y luminosa de nuestro ser esta conectada con todos los ritmos del universo, seriamos concientes de nuestra capacidad de hacer milagros. (como diría Sai Baba: "todos somos dioses, la única diferencia es que yo lo se".
Dejariamos de sentir temor, añoranza, angustria, odio, anciedad y duda.
Vivir desde el nivel del alma, significa dejar atrás el ego y las limitaciones de la mente que nos atan a los sucesos.

miércoles, 13 de febrero de 2008

Mis 17

Después de caminar por ese páramo tranquilo con mis pulmones llenos de oxígeno en ese camino de piedra que en algún momento caminaré una vez más, me he dado cuenta de que no sólo estoy ocupando este cuerpo para caminar en la Tierra sino para concientizarme de quién soy y llegar a la cima cósmica como mago, como el hechicero que soy y que está despertando.

Los seres humanos somos seres definidos por la muerte, como bien se encargan de recordarnos todas las grandes religiones sin excepción.

Todo lo que hacemos lo hacemos contra la inmensa oscuridad que nos aguarda al final del camino: amar, parir, crear, trabajar, divertirse, conquistar imperios, soñar.
Vivimos contra el propio sentido de la inercia, que tiende hacia la nada. Mientras nos encaminamos de forma inexorable hacia ella, vivimos y gozamos cada segundo como un milagro que se repite.

Nuestra vida es un momento de luz entre una eternidad. Unos aceptan mejor que otros la tremenda herida de la muerte, pero a todos nos llega. Y siempre antes de tiempo.
La única salida es aprender la lección del dolor y hacer consciente nuestra existencia, por fugaz o transitoria que sea. Vivir, y amar, luchar.

Así que felicidades por estos 17 años de vida.

martes, 12 de febrero de 2008

Refrescando los pies en el frio marmol del Taj Mahal.

Mientras tanto voy por la vida soltando mentiras interesantes, preferiría permanecer oculto entre las líneas difusas del placer efímero… donde empieza el silencio termina mi sueño.

La consolación de la vida y la muerte.


Con fe y tranquilidad... lo que vendrá, vendrá.

Es absurdo tener angustia por la muerte, por el ¿qué hay más allá?... Cuando uno duerme, cierra los ojos, despierta y ya es de día y no sabe cuántas horas pasaron, con la muerte pasa lo mismo... cierras los ojos, pasan los siglos que pasen, si hay otra vida, abres los ojos y estaras en la otra vida...no hay espera, lo sabremos inmediatamente... bueno esa es sólo una consolación.


¿Verdad o mentira?




El Ego es la mayor mentira. Cuando estamos en el vientre de nuestra madre, la neurosis de nuestros padres nos va formando una personalidad que no es la nuestra, nosotros somos como un pequeño Buda, un Dios, la naturaleza nos crea perfectos, con todas las posibilidades del cerebro.

La neurosis familiar y la neurosis social nos crea una personalidad, como un disfraz. Se forma este Ego social en el que uno vive dentro de uno que no es uno… así es que el Ego es una gran mentira y para perforar estas capas que se nos han impuesto hay que entrar dentro del inconsciente para encontrar la verdadera personalidad… por eso uno cambia de una etapa a otra.

La verdad no es palabra, el pensamiento es verdad porque sea real o irreal el cerebro capta el mismo impulso y no lo logra diferenciar… así es que la belleza interior es lo único verdadero.